Hoy retomo una serie que empece halla por el 2013 y la ultima entrada es de 2015. Y es que con la llegada del buen tiempo, y el invierno que hemos tenido hasta el momento, el monte se puede poner este verano como para no tocarlo.
Creo que no es malo recordar como quedo el termino en la segunda quincena del septiembre de 2012.
La semana siguiente al incendio recorrí parte del termino, y la tónica era la misma en todas partes, color negro, silencio, y olor a ceniza.
La primera zona corresponde a El Campo y la Ceja.
Y unos días después aun quedaban llamas .
La siguiente zona es del balneario a la Presa Molina.
De los cañares no quedaban mas que las raíces
Así quedo la fabrica del Corindón.
Lo que mas recuerdo es el silencio que se escuchaba, es una zona en la que los pájaros no cesaban de cantar, no en era así en esos días. Silencio.
La presa Molina.
Después me subí por la Bandera, el Corral de Javier
Del poste de la senda solo quedaban las placas.
Unos días después por encima de la Hoya, las tapas de lo que en su día fueron unas colmenas.
Pero para no dejar un mal sabor de boca, unos meses después los palmitos comenzaron a crecer.
Y los pinos también.
Y las coscojas.
Comentarios
Una respuesta a «Un dia de Septiembre VI»
Confunde que algo tan triste puede ser tan bonito también…