RECUERDOS Y CONFLICTOS

Hace casi un año que estuve por allí, y me vienen a la cabeza muchos recuerdos, aunque mi intención era volver este año, emprendí otros proyectos, con lo que el retorno la comarca Ngäbe-Bougle tendrá que esperar un poco (seguramente el año próximo), aunque ahora mismo me gustaría estar con ellos, pues me están llegando noticias desde allí sobre los conflictos que tienen los Ngäbe con varias compañías hidroeléctricas.

Este es el rio Fonseca, unos kilómetros aguas abajo de este punto se encuentra el proyecto San Lorenzo, como este, hay unos 30 proyectos hidroeléctricos en los ríos de la comarca, y en todos ellos hay conflictos en base al estudio de impacto ambiental, y a las necesidades de los indígenas, y no solo ellos, pues la zona esta muy saturada, y la sociedad civil se esta movilizando.

En estos momentos el mas importante de ellos es el de Barro Blanco, con el cual la empresa genisa pretende

“Posesionarnos como líderes en el mercado eléctrico, ofreciendo un servicio que cumpla y supere los más altos estándares de calidad, ………

Nada dicen sin embargo de los daños a la comunidad Ngäbe los cuales son los legítimos “propietarios” del terreno sobre el que se asienta la presa, con los antecedentes que se conocen, ellos no esperan nada bueno. En el 2011 se completó la presa de Changuinola y numerosos pueblos acabaron inundados, sin compensación alguna. Pero quizá lo peor sea que se les llame parásitos por su algunos de sus propios vecinos cuando son un pueblo que vive bajo los arboles, al lado de los ríos, y sus recursos están en las tierras que van a ser inundadas, quizá los parásitos sean otros.

En el caso de Barro Blanco docenas de poblaciones serán inundadas, también se destruirán los medios de vida de unos 5000 Ngäbe, se trata básicamente de agricultura de subsistencia, y por supuesto la inundación de 2,58 km cuadrados, supondrán la destrucción de parte del hábitat de la amenazada Rana de lluvia del Tabasará.

El proyecto se encontraba en suspensión temporal por incumplimientos de estudios de impacto ambiental, pero la Corte Suprema no ha tardado nada en suspender la moratoria que decreto el Ministerio de Ambiente tras la presentación de un amparo de garantías por parte de la empresa, si embargo los amparos presentados por parte de los indígenas no son admitidos con la misma celeridad.

Los Ngäbe y el gobierno acordaron reunirse para seguir negociando, pero a las ultimas reuniones no han acudido representantes gubernamentales e incluso enviaron un comunicado donde la presidencia de la República informa de la continuidad del proyecto.

Ellos siguen luchando, no me gustaría que se llegaran a extremos como en el año 2012 en el que dos indígenas murieron y otras 40 resultaron heridas en el trascurso de una protesta.

Después de pasar en Soloy unos días el año pasado, no puedo mas que solidarizarme con los Ngäbe-Bougle. Y mas cuando al preguntar en Panamá sobre los proyectos hidroeléctricos de la zona de Chiriquí me contaban que en principio la función de estos seria la de suministrar energía a la zona de Panamá, abaratando el coste de esta, pues depende de centrales térmicas, pero debido a que la red de transporte no estaba en funcionamiento la energía producida en las plantas de Chiriquí se destina directamente a la exportación hacia Costa Rica, con lo cual ni siquiera los propios panameños reciben beneficio alguno de estas plantas, y es que es muy fácil para algunos hacer caja amparándose en una necesidad real.

Ojala consigan mantener sus terrenos, costumbres y su forma de vida integrando en ellas lo mejor que podamos ofrecerles de la nuestra.

ÑAGARE BARRO BLANCO

ÑAGARE HIDROELECTRICAS

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