Artesanias
Al día siguiente había quedado con Terremoto para ir a recoger plátanos, pero cunado llegué a su casa, ya los habían bajado y estaban cargándolos en el carro que se los iba a llevar, así con nos subimos en la piragua, y por el río Chucunaque hacia arriba nos fuimos a Bellavijaguell. Allí, nada mas llegar, se nos acercaron varias mujeres Emberá con la idea de venderme artesanías, pero Terremoto no me había prevenido de ello, con lo que no llevaba encima mas que 10 $ con lo que no pude complacerlas, aun así, les mencioné que tengo una pagina web donde voy`publicando mis fotos, y no tardaron nada en montar una pequeña exposición de su trabajo,